Loader Image

La artrodesis cervical consiste en fijar dos o más vértebras entre sí, anulando la movilidad del disco que hay entre ellas, ya sea por vía anterior o posterior.

La artrodesis cervical esta indicada en pacientes con degeneración avanzada del disco intervertebral (discopatía degenerativa cervical), desplazamiento de una vértebra respecto a la inferior (espondilolistesis), inestabilidad de un disco intervertebral (hipermovilidad), y asociado a la descompresión en casos de hernia discal cervical o canal cervical estrecho o mielopatía cervical.

Básicamente existen dos vías para realizar la fusión de la columna cervical.

La artrodesis cervical anterior es la técnica más común, y se realiza con una incisión de 4-5 cm en la parte lateral anterior del cuello, y desde la misma se retira el disco deteriorado, se descomprime la médula en caso de hernia discal o compromiso de la misma, y se implanta una caja rellena de injerto de hueso junto con una placa atornillada.

La artrodesis cervical posterior se realiza a través de una incisión en la zona posterior del cuello y se implantan tornillos en las masas laterales de la vértebra, los cuales se unen por unas barras. En este caso también se coloca injerto en la parte posterior.

Habitualmente los pacientes permanecen inician sedestación y deambulación al día siguiente a la cirugía. Los drenajes se retiran a las 48 horas después de la intervención. Se recomienda un collarín blando de confort durante cuatro semanas. Al tercer día postoperatorio pueden ser dados de alta del hospital siendo autónomos para las actividades de la vida diaria. Los puntos se retiran entre los 10-14 días y el paciente sigue la rehabilitación de forma ambulatoria. El paciente puede retornar a sus actividades habituales alrededor de los tres meses después de la cirugía.